Los “gastos invisibles” suponen a los españoles una media de 30 euros al día

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), más de la mitad de los españoles declara no disponer de dinero suficiente para poder ahorrar. A pesar de este dato, el “Estudio de comparación online hacia el ahorro inteligente” elaborado por Rastreator.com, revela que el 66% de la población podría ahorrar algo de dinero a fin de mes si se lo propone.

A la hora de hacer nuestro presupuesto del mes, solemos pensar en los gastos grandes como la hipoteca, el alquiler, la compra, las facturas del agua y la luz, etc. Pero qué pasa con los pequeños gastos que nunca se presupuestan. El café de la mañana, el tabaco o las pequeñas compras de última hora, que en ocasiones ni siquiera llegan a los dos euros, pero que son una de las razones principales que nos impiden ahorrar.

Según el cuarto Estudio Fintonic sobre los gastos “come nóminas” de los españoles, 8 de cada 10 familias desconoce en qué partidas se gasta el dinero. “En el día a día acumulamos una serie de gastos habituales a los que los expertos llaman “gastos invisibles”, que si no los tenemos en cuenta pueden trastocar nuestra economía”, apunta Dhiren Chatlani, Portavoz de Relendo (www.relendo.com), una plataforma que permite ahorrar en la cesta de la compra alquilando las cosas que necesitamos de forma puntual.

Lo cierto es que, desde que comenzamos el día comenzamos a gastar sin darnos cuenta. Por ejemplo, en el gimnasio al que nunca vamos por no levantarnos un poco antes y por el que se paga una media de 50 euros al mes. O cuando llega el momento de desayunar y optamos por comprar un café de camino al trabajo o a media mañana. Según la Asociación de Consumidores FACUA, el precio medio de un café en España es de 1,18 euros, por lo que tomar dos cafés al día supone unos 55 euros al mes.

Otro de los gastos diarios más importantes y en el que no solemos pensar es el transporte. A la hora de ir al trabajo, el transporte público se convierte en la mejor opción para ahorrar tiempo y dinero. Según el citado estudio, ir en coche a trabajar supone un gasto medio de 242 euros al mes, mientras que hacerlo en transporte alternativo sale de media por unos 60 euros al mes.

Continuamos el día y llega la hora de comer. Según la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes, FUCI, comer fuera de casa todos los días supone un gasto medio de 217 euros al mes. Una manera de ahorrarnos este dinero es llevar el tupper de casa, que si bien no es la opción más cómoda sí es la más económica.

Cuando parece que la jornada ha terminado, toca la caña afterwork. Según FACUA, el precio medio de una caña en España es de 1,46 euros. Y si nos tomamos una todos los días después de trabajar son 33,58 euros al mes.

“A pesar de que algunos de estos gastos son necesarios, siempre cabrá la posibilidad de reducirlos un poco cambiando nuestros hábitos diarios y prestando un poco más de atención a las compras que hacemos” concluyen desde Relendo.

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5 consejos para afrontar los exámenes con éxito

Por mucho que te lo propongas y te organices, el tiempo pasa volando y, cuándo te quieres dar cuenta, tienes los exámenes a la vuelta de la esquina. Cuando eres estudiante existe una ley de Murphy: inexplicablemente, cuando decides ponerte las pilas, siempre crees que es tarde y no vas a llegar a tiempo y te imaginas todo el verano entre libros preparando las recuperaciones, pero no tiene por qué ser así.

Desde Uniplaces, portal de reserva de alojamiento para estudiantes, lanzan 5 consejos para enmendar todo el tiempo perdido y afrontar los exámenes con éxito. Por éxito se entiende aprobar tampoco son milagrosos pero sí útiles y funcionan:

  1. 1.      Fija un horario y un lugar de estudio: habilita un lugar fijo para estudiar, no empieces a ir cada día a un sitio distinto, bastante tiempo has perdido durante los meses anteriores como para andar de aquí para allá en el sprint final. Es clave acostumbrar al cuerpo y la mente a un lugar y una hora estable dedicada al estudio. Si te fijas horarios de inicio y fin, te cundirá muchísimo más puesto que estarás mentalizado que esas horas van dedicadas a esa tarea. A dos o tres semanas previas de los exámenes es fundamental que te organices y establezcas unas reglas para el estudio, sólo son 15 días.
  1. 2.      Asimila, no memorices: No pierdas el tiempo intentando memorizar todo lo que no has estudiado en meses, es mucho más fácil si lo haces como una lectura, concentrándote y tratando de entender lo que estás leyendo. Está demostrado que si entiendes lo que lees es más fácil retenerlo que si te dedicas a repetir una y otra vez las frases de unos apuntes que quizá ni has escrito tú. De manera que la recomendación es hacer varias lecturas de forma intensa y con absoluta concentración, intentando razonar y entender lo que estás leyendo.
  1. 3.      Comparte el conocimiento: Poner en común lo estudiado es clave para retener más información, eso sí, nunca te metas en un grupo que está compartiendo conocimiento si tú no has estudiado nada puesto que sólo conseguirás ponerte más nervioso. Por ello, la recomendación es clara, pon en común la materia cuándo tú la hayas leído o estudiado por tu parte, entonces te será de gran utilidad compartir con los compañeros explicaciones o temas que retendrás con mayor facilidad. Estas “terapias” en grupo son recomendables hacerlas dos o tres días antes del examen para poder retener nuevos detalles que pasaste por alto así como reafirmar tus conocimientos y sentirte más seguro.
  1. 4.      Mens sana in corpore sano: después de todas las fiestas universitarias, resacas y la vida nocturna que has disfrutado, es hora de depurar; las semanas de estudio trata de evitar comida basura, bebidas energéticas o alcohol, por supuesto. Come sano para tener una mente sana y así ser más hábil y eficaz en el estudio; la pesadez en el estómago o comer en exceso puede darte sueño o desconcentrarte y no rendir en este sprint final. De manera que hidrátate mucho, come bien y, en los breaks, en lugar de tomar café o bollería, come fruta con potasio para agilizar el funcionamiento cerebral.
  1. 5.      No estudies el día del examen: todo lo que no hayas retenido en los días o semanas anteriores, no lo harás el día del examen puesto que la tensión de ese día se convierte en una barrera cerebral que no te dejará procesar más información. Lo único que puedes hacer el día del juicio final es intentar relajarte y releerte los apuntes pero, normalmente, esas lecturas no valen de nada puesto los nervios te impiden concentrarte. El consejo para ese día es que duermas el máximo de horas posible, te relajes, un buen desayuno y a hacer lo mejor que se pueda. ¡Buena suerte!

 

¿Por qué mi equipo de trabajo no funciona?

El mayor activo con el que cuentan las empresas son sus profesionales que, a su vez, requieren una de las tareas más complicadas: mantenerlos siempre alerta, satisfechos y motivados. Dicha responsabilidad, normalmente, recae directamente sobre los managers o responsables de los equipos de trabajo. Sin embargo, en ocasiones, no es cuestión, únicamente, de que el jefe sea un buen líder, si no de analizar más allá el papel que juega cada profesional dentro de una empresa.  “A pesar de que la creencia habitual del motivo de desmotivación o frustración de los profesionales recae directamente como responsabilidad del manager, en ocasiones, simplemente es porque tenemos mal posicionado el talento y hay que redistribuir las tareas para optimizar los equipos de trabajo”, señala Àngels Creus, socia directora de Essential For Business.

Desde Essential For Business, dan 4 claves para detectar posibles ineficiencias dentro de un equipo de trabajo y así poder sacar el máximo provecho y conseguir la satisfacción de los miembros que forman parte:

  1. 1.       Comunicación ineficaz.  Para el buen funcionamiento de una empresa que trabaja a nivel global, es fundamental que todos nuestros profesionales puedan abordar cualquier situación en una lengua extranjera como si fuera la suya propia. La falta del dominio de las habilidades de comunicación y del propio idioma pueden llevarnos a una comunicación ineficaz.  Para evitar esta ineficacia provocada por malentendidos y situaciones que llevan a crear suspicacias y desconfianza, es necesario proporcionar herramientas e información a los equipos, formar en aspectos interculturales, preparar a los diferentes interlocutores no sólo formando con antelación en idiomas sino también en la propia habilidad de comunicación y en el respeto hacia otras culturas.
  1. 2.       Reuniones poco efectivas. En relación con el punto anterior, cuando se habla de habilidades comunicativas, precisamente, nos referimos a abordar situaciones del día a día como pueden ser reuniones. Es importantísimo que tengamos la seguridad de que vamos a llevar el liderazgo o la participación en la misma como si fuera en nuestro propio idioma. Si no dotamos a cada uno de los profesionales de las herramientas y los recursos lingüísticos necesarios, éstos acabaran por no asistir a las reuniones o entender la mitad de lo que se está comentando, convirtiendo estas reuniones en encuentros poco efectivos. Las reuniones debe ser el punto de encuentro entre todos los profesionales para alinear desde cada posición los objetivos comunes de la empresa y sin un entendimiento por parte de todos, es imposible.
  1. 3.       Cada posición es importante.  Es vital que cada posición de la empresa esté cubierta por un profesional con el perfil adecuado y que cada profesional tenga asignado un rol para el que sienta preparado y que le ofrezca posibilidades de desarrollarse. Es importante que el papel que desarrolla cada profesional esté también alineado con su talento. En ocasiones, es muy probable que tengamos a profesionales desempeñando tareas para las que no están preparados o habría otras en las que podrían dar mucho más de sí mismos. Por ello, es clave en el desarrollo de una compañía que la posición que ocupa cada profesional sea la adecuada a sus conocimientos y capacidades. Y, en el caso, que no sea así dotar al profesional de la formación necesaria para conseguir el éxito. Si una pieza falla, el puzzle entero también. Tenemos que tener muy claras las habilidades clave en cada puesto y saber medir bien qué habilidades son más fácilmente “aprendibles”, para así realizar asignaciones correctas y planes de formación que permitan adquirir los skills a cubrir.
  1. 4.       Falta escucha activa. El ritmo acelerado de trabajo que se vive día a día en las oficinas, en muchas ocasiones, hace que de forma recurrente nos ocupemos de lo urgente y no de lo importante. En ocasiones, es fundamental, pararse y escuchar a los profesionales para entender sus inquietudes y dificultades de ahí buscar una estrategia para que cada uno de ellos pueda explorar al máximo su talento. La satisfacción de cada empleado es el éxito de la compañía.

Para evitar estas y otras ineficiencias y optimizar el talento de nuestros profesionales, Essential for Business, cuenta  con un software que permite evaluar las competencias y habilidades que tiene un profesional y compararlo con la posición deseada para cumplir con los objetivos estratégicos de la empresa Este análisis permite la realización de un estudio del caso posterior para ver las necesidades de aprendizaje que se derivan de cada caso concreto con la finalidad de llegar al perfil ideal. “A partir de este software analizamos si  la posición en la que se encuentra cada profesional es la adecuada para que éste pueda dar el máximo de sí mismo y cumplir con los objetivos de la empresa. Definimos el camino para que los objetivos de la empresa estén alineados con el talento de cada profesional y optimizar los equipos de trabajo”, explica Bea Navarro, cofundadora de Essential For Business.